Las aplicaciones móviles están en el centro de la polémica dadas sus políticas de uso y el escaso empeño que ponen en salvaguardar la privacidad de los usuarios. Dentro de esta polémica, el sistema operativo Android es el que acumula mayor número de quejas.
La plataforma móvil de Google basada en código abierto domina el mercado de los smarpthones con una amplia mayoría de cuota. Esta gran penetración en el mercado unida al exponencial auge del uso de apps ha propiciado que en su tienda online se puedan encontrar miles y miles de opciones gratuitas que prometen (y, en muchos casos consiguen) ofrecer una gran utilidad. El problema, de este crecimiento reside en que son muchos los desarrolladores que solo buscan su propio beneficio y no se detienen un segundo en preocuparse por temas de seguridad, protección de datos o privacidad de los usuarios.
Seguramente, tras descargar alguna aplicación te habrá llamado la atención algunos de los requerimientos y permisos que solicita. Por ejemplo, existen aplicaciones que utilizan el flash de la cámara de los teléfonos a modo de linterna. Una app simple que puede ser de gran utilidad pero que para instalarse exige «acceso completo a la red«. Un requerimiento muy difuso que el usuario no puede conocer realmente qué significa o cómo será utilizado por la aplicación.
Para tratar de ayudar en parte al usuario a que conozca cómo de intrusiva es una de estas apps de Android se ha desarrollado PrivacyGrade.
PrivacyGrade es un proyecto desarrollado por investigadores de la Universidad Carnegie Mellon de Pittsburgh (Pensilvania – Estados Unidos) consistente en una base de datos con información acerca de la privacidad que ofrecen miles de apps compatibles con Android.
El acceso a esta recopilación de información es muy sencillo al haber sido desarrollado como un portal con una interfaz amigable para el usuario. Los pasos a seguir para conocer la información de privacidad de una app a través de PrivacyGrade son muy sencillos. Lo primero es acceder a su sitio web privacygrade.org y después localizar en la parte superior un localizador donde introducir el nombre de la aplicación a investigar.
Una vez hecho esta búsqueda, en pantalla se obtiene un informe con detalles acerca de los términos de uso y privacidad de la aplicación así como una calificación que va desde la A (la mejor calificación) a D para las aplicaciones más invasivas y menos respetuosas con la privacidad del usuario.
Lo malo de PrivacyGrade es que se trata solo de una funcionalidad informativa ya que será cada uno después el que debe decidir si le merece la pena o no hacer uso de una app concreta. Aún así, me parece una herramienta interesante para los más preocupados en estos aspectos. Mientras, seguiremos confiando en que los organimos reguladores y autoridades pertinentes sigan trabajando en pos de una mayor protección para los usuarios.