La última propuesta a nivel europeo de reforma integral de la privacidad de datos incluye un endurecimiento de las sanciones. En los casos más graves, dichas sanciones pueden llegar a multas de 1.000.000 de euros o el 2% de la facturación global de la empresa sancionada. Actualmente, la legislación española contempla una sanción máxima de 600.000 euros.
El endurecimiento de las sanciones no es la única novedad que incluye dicha propuesta donde también se habla de la incorporación de la figura del Delegado de Protección de Datos, el establecimiento de los derechos al olvido y la portabilidad de datos. Temas que preocupan mucho en el seno de la Unión Europea y en los que se está trabajando por mejorar en los últimos meses.
La propuesta europea se refiere al consentimiento de los menores para el tratamiento de sus datos -otro de los temas más espinosos- pero solo en lo relativo a la oferta de servicios de la sociedad de la información. En España no se limita a este sector. La propuesta considera válido el consentimiento a partir de los 13 años (en España se cifra la edad en 14 años) sin necesidad de una autorización de padres o tutores.
Desde la UE se explica que esta normativa tiene aplicación plena también a las organizaciones religiosas aunque el reglamento respeta y no prejuzga el estatuto reconocido a estas por el derecho interno de cada uno de los estados miembros de la Unión.